PHP es el lenguaje de programación que mueve casi el 80% de las webs a nivel mundial. Gran parte se debe a que WordPress es el gestor de contenido por excelencia.
Periódicamente se lanzan versiones nuevas en las que se corrigen errores por un lado y se añaden nuevas funcionalidades por otro.
Algunos de estos cambios son rompedores con la versión anterior, ya sea porque algunas instrucciones del lenguaje se vuelven obsoletas o directamente se eliminan.
Lo que sí se consigue versión a versión es que el rendimiento sea superior. Con lo que por ejemplo, el WPO mejoraría al recibir una respuesta más rápida.
PHP también va dejando de dar soporte a diferentes ramas principales con el tiempo. En una primera fase se deja de dar soporte activo y sólamente se mantiene el soporte de seguridad para luego finalmente dejar abandonada la rama.
Actualmente, según la propia web de PHP tenemos que actualmente se mantienen vivos la rama PHP 7.4 en adelante.
La rama PHP7.3 solamente recibirá soluciones a errores de seguridad hasta finales de año 2021.
A día de hoy, según datos extraídos de W3Techs el 60% de las webs realizadas en PHP se mueven en alguna de las versiones 7.
Pero casi un 40% sigue utilizando versiones de la rama 5. Aún cuando vemos que se dejó de dar soporte por completo a la versión 5.6 en enero de 2019. Hace más de dos años.
Durante este tiempo, cualquier fallo de seguridad que aparezca, ya no será corregido y los servidores que funcionen con estas ramas están expuestos a ataques externos.
La distribución dentro de la rama 7 es bastante pareja, pero vemos que la última versión en desarrollo activo, la 7.4, es el tercero.
Recientemente, el día 1 de enero, se lanzó la última versión disponible. La rama 8. Conlleva un buen número de cambios y mejoras, pero dependiendo de la versión de partida de nuestro proyecto, tendremos que realizar más o menos cambios en el código base.
En un entorno WordPress, de lo que nos tendremos que preocupar, más que del propio cms, es de la actualización de los plugins.
Muchos plugins quedan abandonados o sin actualizaciones y es posible que simplemente con cambiar de rama nuestra web deje de funcionar.
También, los plugins custom que haya desarrollado nuestro equipo deberán recibir un poco de mimo y ver cómo se comportan con estas nuevas versiones.
Es imprescindible hacer estas pruebas en un servidor que no sea el de producción y revisar los ficheros de log de errores para ver qué aparece.
Es muy importante mantener nuestro servidor actualizado y nuestra web también. Cuanto más lo dejemos pasar mayor será el cambio y el tiempo a invertir y más indefensos estaremos a ataques en los que nos podemos encontrar nuestro servidor lleno de virus o convertido en un emisor de spam.
Para concluir, si queremos dormir bien por las noches, tengamos a punto todos nuestros sistemas.